miércoles, 29 de abril de 2020

Seroprevalencia


Si por cada una de las más de 800.000 propuestas de sanción a la población civil durante estas últimas seis semanas se hubiese hecho un test de detección del virus o de anticuerpos se habrían salvado muchas vidas y ahora sabríamos más sobre el número real de víctimas y de infectados y sobre el alcance real de la pandemia. Es difícil luchar contra ella cuando no se sabe su verdadera dimensión.

Pero no, parece que para el Estado la receta que prevalece es la represión con amenazas y sanciones de más que dudoso alcance legal y recorrido jurídico, el recorte de libertades incluyendo, (sobretodo), el de libertad de expresión, la persecución, investigación e identificación a los que protestan por parte de las FCSE y que demasiadas veces se hacen virales por el uso abusivo de violencia, el control, la desinformación,el gasto en armamento militar en vez de priorizar la inversión en sanidad...

Y así vamos.
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Never le nkemise, Nada nos detendrá.

lunes, 27 de abril de 2020

Bougainvillea



Sol púrpura y ardiente
pero el viento
es de otoño.

Matsuo Bashô, 1644-1694
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jueves, 23 de abril de 2020

Para cuentos los de Calleja


Leer nos hace libres.

Por eso, cuando quiero leer cuentos elijo los de Calleja y no los torpemente narrados por una clase política que con sus patrañas pretende vendernos un relato ficticio que pone en evidencia su ineptitud e inoperancia ante una realidad que no supieron ni parece que quieran ver haciendo oídos sordos de la opinión de expertos y cuyos errores pagamos con vidas y sufrimiento.

Más libros, más lectura, más conocimiento, más libertad, menos mentiras, menos manipulación, menos autocomplacencia y en definitiva menos cuentos.

Porque para cuentos, los de Calleja.
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martes, 21 de abril de 2020

Pandemia


Vuela en la noche
tan sediento de aliento
el murciélago.
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domingo, 19 de abril de 2020

El mundo huele a muerte y desolación


En memoria de los difuntos por el virus.
D.E.P.

La muerte de cualquier hombre me disminuye porque estoy ligado a la humanidad; por consiguiente nunca hagas preguntar por quien doblan las campanas: doblan por ti.

John Donne, 1572-1631.
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INSOMNE

Las tres y cinco de la madrugada.
Prisionera del insomnio
y casi sin fuerzas para inventar un nuevo día,
miro al fondo de la noche
como una liberación.
La ciudad entera hiede a cementerio,
a tejado pobrísimo.
Todo está dormido en ella.
Todo excepto una penumbra
que adelanta el paso a través de las ruinas.
Enciendo un cigarrillo
y el humo me sabe a cárcel podrida,
a llama concluida.
Lo cierto es que no hay ningún maravilloso sueño
a la vuelta de la esquina.
Todo lo que hay puede palparse con los ojos;
Miseria.
Miseria y un inmenso vertedero de sufrimiento anónimo
que avanza sin ayeres ni futuro.

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viernes, 17 de abril de 2020

Mono no aware




¡Cómo me gustaría
lavar el polvo del mundo
con esas gotas de rocío!

Matsuo Basho, 1644-1694
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miércoles, 15 de abril de 2020

Big Brother is watching you



Sed disciplinados y obedeced al Estado, él vela por nosotros.

Pone en primer lugar de sus intereses nuestra salud y por eso apuesta por la "inmunidad de rebaño", porque el Estado es nuestro pastor y nosotros sus ovejitas, mira si había palabras para designar el término.

Nos hará creer que sus medidas para evitar la pandemia fueron y son las mejores y siempre anteponiendo nuestra salud a los intereses económicos.

Nos prometerá ayudas económicas sin intereses, la cancelación de los alquileres mientras dure la pandemia, largos plazos para pagar las deudas y nos garantizará una renta mínima vital para toda la población.

Nos dice que apostará por la sanidad pública y que no hará más recortes.

Impone un duro confinamiento para enmascarar su fracaso en la decisión de medidas que debió tomar para impedir la expansión del virus.

Utiliza sus medios de propaganda para lavar su imagen y nos pide que estemos suscritos a ellos.

Apela a la unidad de todos los españoles para salvar su nefasta actuación ante la crisis.

Y bla, bla, bla...
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A estas alturas pocos se cuestionan que tras este grave periodo que estamos encarando es probable que un nuevo orden mundial aflore. Los países se miran de reojo en la aplicación de medidas y éxito de las mismas para afrontar esta crisis porque saben que quien mejor la gestione saldrá beneficiado, y por el momento parece que quien gana la partida es Oriente pese a los esfuerzos del bloque de Occidente de desacreditar, señalar y culpabilizar.

En Hong Kong aparecía una pintada que decía: "No puede haber retorno a la normalidad porque la normalidad era el problema de origen". Quizá sea cierto, pero también cierto es que deberemos acostumbrarnos a otra normalidad, una "normalidad" que nunca hubiésemos imaginado y que cambiará drásticamente el mundo que conocíamos.

La epidemia no solo la combaten médicos, virólogos y epidemiólogos. Se imponen otras medidas que pasan por el Big Data, el control masivo de datos para el análisis del comportamiento y ubicación de la población, y los teléfonos móviles son los grandes delatores.

Quizá con el tiempo se expida un certificado a los que han pasado la enfermedad y son teóricamente inmunes, con lo que habrá dos tipos de ciudadanos, los "sanos" y los que puedan enfermar y/o contagiar y a los que se les restrinja de alguna manera su actividad.

Y mientras gobiernos y políticos luchan por establecerse en el poder la pandemia sigue avanzando dejando su siniestro rastro por todo el mundo, no sabemos cuántos contagiados hay, ni cuántos muertos, ni cuántos portadores de anticuerpos, ni lo que duran los anticuerpos en el cuerpo humano, ni si el virus muta, ni cuándo habrá vacuna, ni qué medicamentos funcionan... no sabemos apenas nada.

Pero sí sabemos ya sobre la virulencia del virus, la grave crisis que ha generado su expansión, la catástrofe masiva social y económica que está generando y que será especialmente dura en países en vías de desarrollo, y que el virus ha venido para quedarse.

Y también sabemos que Big Brother nos mira, así que portaos bien, no critiquéis al gobierno, dejad vuestra huella digital en las redes sociales y llevad siempre en móvil allá donde vayáis.

El control será la nueva normalidad.
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lunes, 13 de abril de 2020

Estamos solos


Estamos solos.
La lluvia nos acuna
como una nana.

Félix Morales Prado
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sábado, 11 de abril de 2020

Entropía




El orden se desintegra en caos y el caos construye el orden.

"De la teoría del caos y del desorden a la estética", Manuel Esperón Rodríguez
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jueves, 9 de abril de 2020

Otros mundos


Estamos confinados, pero a la mente nadie le puede poner cadenas.
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martes, 7 de abril de 2020

No me toques el higo



Higuera amiga
de tu rama arrugada
¡cinco alhajas!
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Parece que ahí afuera la naturaleza sigue su curso y la primavera da sus frutos.

Así lo atestigua la higuera de casa, que esta temporada se está mostrando especialmente generosa como si de alguna manera quisiera con su alegría compensar la pena y la incertidumbre que nos habita estos días.

No podremos dar largos paseos por la naturaleza, pero mis ojos no se cansan de recorrer los pequeños retazos que de ella están a su alcance.
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domingo, 5 de abril de 2020

Ruega por nosotros



Quizá algún día sepamos qué o quienes provocaron el virus en la cadena humana.

Quizá algún día sepamos el número real de víctimas y contagiados reales a nivel estatal y mundial.

Quizá algún día sepamos por qué el Estado no tomó las medidas preventivas a su debido tiempo para frenar la expansión del virus.

Quizá algún día sepamos por qué el Gobierno menospreció la virulencia del virus permitiendo el contagio masivo y sin aconsejar a la población las medidas básicas a tomar para evitarlo.

¿De qué nos sirven unos políticos que parecen más interesados en la economía y en salvar su sueldo que en salvar la vida de las personas?

¿De qué nos sirven unos gobernantes que han sido incapaces de evitar esta gran catástrofe mundial, humana, social y económica que estamos viviendo a pesar de haber sido advertidos por expertos a quienes desoyeron?

¿Para qué nos sirven unos dirigentes que nos mienten y manipulan la información a su interés para maquillar sus fracasos y sacar beneficio de ello?

¿Y una monarquía que impávida ve como sus súbditos se arruinan, enferman y mueren mientras ella nada en lujos y riquezas?

¿De qué manera y cuánto cambiará el orden mundial y la manera de relacionarnos tras esta  gravísima crisis?

Quizá no lleguemos a saber lo que nos preguntamos, pero ni olvidamos ni perdonamos.
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Los que seáis creyentes rezad por los muertos y poned unas cuantas velas a la Virgen de los Milagros para que no seáis la próxima víctima.

Los demás lamentemos tanto dolor inflingido con el corazón encogido, no nos dejemos engañar por los medios de comunicación del régimen, acudamos a fuentes de información veraces y hagamos lo posible para que los que nos han llevado a esto no nos vuelvan a representar.

Y todos cuidémonos, ayudémonos, seamos generosos, y tomemos todas las medidas para evitar contagiar y ser contagiados. 
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viernes, 3 de abril de 2020

Todo es nada



Los días
son cada vez 
más pálidos.
Hace frío en el alma.
De repente
todo es nada.
En el horizonte
el miedo 
y la muerte
se ríen y nos señalan.

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jueves, 2 de abril de 2020

#Quédate en casa



¿Cuántas vidas se hubieran podido salvar si el gobierno hubiese hecho caso a su debido tiempo de las advertencias de los expertos en vez de reaccionar tarde y mal ante la amenaza de pandemia?

¿Cuánto sufrimiento se podría evitar con los millones que tiene la monarquía en paraísos fiscales?

¿Cuántos trabajadores y familias se están yendo a la ruina por las medidas chapuceras de unos políticos que priman la economía por encima de la vida, la salud y el bienestar de las personas?

¿Y nosotros tenemos que seguir pagando sus sueldos?

¿Y nosotros tenemos que seguir callados encerrados, mirando sus des-informativos, acordándonos de tantos años de recortes en sanidad, viendo como nos deterioramos física y psicológicamente, sin poder despedir a nuestros muertos, sin poder pagar las deudas, sufriendo su represión, controlados por la geolocalización de nuestros móviles y temiendo por la salud del personal sanitario y demás trabajadores indispensables?

Sí, nosotros nos quedaremos en casa por responsabilidad y por respeto a la vida de nuestros semejantes.

Pero no os extrañe que cuando todo esto pase cambiemos las mascarillas, los guantes de látex y el jabón desinfectante por voces alzadas, puños en alto y gasolina en las calles.

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